Envase doble que permite el transporte y almacenaje de toallitas tanto húmedas como secas, ofreciendo al usuario una forma de llevar siempre las dos toallitas necesarias para una correcta higiene.
Uno de los problemas más frecuentes asociado al uso de las toallitas húmedas en personas es que los usuarios hacen mal uso, ya que las utilizan para la eliminación de las heces y orina, pero no secan la piel, lo que acaba derivando frecuentemente en irritaciones y dermatitis.
La no existencia de un material secante reduce considerablemente el efecto de limpieza de la toallita húmeda, ya que la suciedad no acaba de eliminarse completamente y la humedad que deja la toallita podría ocasionar problemas dermatológicos o irritaciones por su uso.
UNA BUENA HIGIENE GRACIAS AL USO DE LAS TOALLITAS DOBLES
Tras el uso de las toallitas húmedas para la higiene personal, lo más importante es secar cualquier parte del cuerpo, ya sean manos, boca, pliegues, genitales, etc. De este modo, se evita tener que emplear métodos paliativos como la aplicación de óxido de zinc para mantener la zona seca, una vez que la piel ya está irritada o ulcerada debido a la humedad; o tener que recurrir a pomadas antifúngicas en el caso de colonización por hongos.
El modo correcto de aplicación es utilizar las toallitas húmedas para limpiar y arrastrar suciedad e, inmediatamente después, usar las toallitas secas para secar la zona o superficies, sin tener que recurrir a papel, toallas o compresas de algodón.
ENVASE VERSÁTIL CON MÚLTIPLES APLICACIONES
No sólo es un envase dirigido al sector de la higiene personal. También dirigido a:
- Mascotas: Si no se seca correctamente la humedad que deja la toallita húmeda, las posibilidades de la adherencia de bacterias en el pelo de la mascota aumentan.
- Hogar: De igual modo, tras la limpieza con toallitas húmedas de muebles, cristales, electrodomésticos, acero inoxidable, vitrocerámicas etcétera, si no se realiza un secado con un paño o papel seco, para el arrastre de la suciedad y humedad, la superficie afectada no queda en perfectas condiciones, siendo más propensa a atrapar el polvo.
- Automoción: En el caso de los automóviles, tras la limpieza de salpicaderos, la tapicería etcétera, se precisa de papel o paños para su secado, arrastre de suciedad y eliminación de la humedad restante.
Las soluciones que ofrece actualmente el mercado de envases no ofrecen al usuario la posibilidad de disponer de un elemento que humedezca y otro elemento que seque, por lo que el usuario tiene que emplear un material de secado que puede no ser adecuado, tiene que desplazarse del sitio en su búsqueda o puede que deje sin secar la zona, con los problemas que se han mencionado que esto pueda acarrear.
Gracias a la configuración del envase doble se pueden almacenar y transportar conjuntamente toallitas húmedas y toallitas secas, facilitando que un usuario tenga a su alcance los medios necesarios para realizar la correcta limpieza de una zona del cuerpo.