Hoy en día, con el avance imparable de la tecnología y las comunicaciones inalámbricas, las posibilidades de que se produzcan cortes en las frecuencias aumentan exponencialmente.
Sistemas de telecomunicación como LTE, 4G o 5G, si bien aportan grandes ventajas en cuanto a la calidad y la velocidad de la información, pero también ocasionan inconvenientes entre distintos dispositivos que tienen que estar interconectados.
La potencia de los canales de telefonía móvil es muy superior a la potencia de televisión, principal motivo para que puedan ocurrir interferencias. Con la llegada del 5G, los clientes de telefonía móvil ganan en velocidad y calidad de cobertura, pero también afrontan posibles interferencias que afectan a la señal de televisión.
La frecuencia dedicada a la televisión se ve reducida para hacer hueco a las frecuencias del 5G, y esto ocasiona varios inconvenientes.
Si bien es cierto, para las parabólicas existe un aparato llamado LNB que contiene filtros de ruido que no dejan entrar las interferencias, o cables con triple apantallamiento que se recomienda tener en las conexiones de dichos aparatos para mitigar el ruido lo máximo posible. Para las televisiones terrestres existen dispositivos como amplificadores de mástil con LTE y 5G entre otros, en ambos casos la unión de los cables coaxiales con el conector “F” sigue sin protección.
El conector F es un tipo de conector para cable coaxial de radiofrecuencia, de uso común en la televisión terrestre por antena aérea, televisión por cable y universal para la televisión por satélite y los cablemódems, por lo general con el cable RG-6 o en instalaciones antiguas con RG-59.
Un nuevo protector con doble funcionalidad
Para los conectores nombrados, muy comunes en viviendas y oficinas, sí se conocen protectores para inclemencias meteorológicas, sin embargo, éstos, al no disponer de material aislante, no evitan interferencias.
¿Cómo solucionarlo?
Creando una nuevo protector constituido a partir de los siguientes elementos:
- Una pieza formada por un tubo de cobre de 2, 5 cm. de largo con un diámetro de 15 mm., y otro tubo de cobre de 2, 5 cm. de largo y 12 mm. de diámetro, unidos por una reducción de cobre de 15 mm. a 12 mm. Esta pieza cubre el extremo de un cable coaxial con conector “F” que va conectado a un dispositivo.
- Para la protección de la unión de cables coaxiales se utiliza la pieza descrita anteriormente, y, por otro lado, una segunda pieza compuesta de un tubo de cobre de 15 mm. de diámetro de 1, 5 cm. de largo, otro tubo de cobre de 12 mm. de diámetro de 2, 5 cm. de largo, unidos con una reducción de cobre de 15 mm. a 12 mm. de diámetro. Ambas piezas a su vez se unen con un manguito de cobre para unión de tubos de 15 mm. de diámetro.
Grandes ventajas y fácil instalación
En caso de que se desee conectar el cable coaxial con conector “F” a un dispositivo electrónico, como por ejemplo un televisor, se inserta el extremo del cable coaxial con el conector “F” en la pieza primeramente por la zona del tubo de 12 mm. de diámetro, dejando así el tubo de 15mm. de diámetro hacia el dispositivo. De esta manera, al realizar la conexión del conector “F” con el dispositivo o cable que se desee, el protector antinterferencias lo cubre.
En el caso de que se unan dos cables coaxiales, se utilizan las dos piezas descritas unidas por el manguito de cobre cubriendo de esta manera los conectores “F” con dichas piezas.
En definitiva:
– Fácil instalación.
– Es una solución sencilla.
– Producto fácil de fabricar y económico.
– Volumen reducido.
– Fácil de transportar y de almacenar.
– Eficaz contra las interferencias en los conectores tipo “F”.
– Es compatible con los sistemas y cables utilizados actualmente.